El sábado pasado, el presidente de la Nación Javier Milei anunció una baja de retenciones agropecuarias que vienen despertando posturas bastante encontradas entre los que creen que es un beneficio superlativo para un sector “rico“, mientras que desde otro lado apuntalan la decisión por considerar a los derechos de exportación como “confiscatorios“, además de ser una medida que cuando se tomó allá lejos y hace tiempo fue con un fin específico, pero se terminaron quedando casi 20 años. Amén que los precios de los granos distaban mucho de ser los actuales. Por ejemplo, la soja (principal cultivo de la Argentina) superaba los 600 dólares la tonelada y hoy está en niveles de u$s 350/ton.
Rebaja de las retenciones: el Gobierno busca los dólares del campo para domar la suba de la divisa
Ahora bien, la discusión por estos días se centra en el impacto que tendrá la medida en la recaudación, y hay estudios, como el de IDESA, que sostienen que generará un fuerte impacto en el fisco, pero no así en las cuentas de los productores agropecuarios. En efecto, el estudio explica que, la reducción parcial de los derechos de exportación equivaldría a 0,2% del PBI, y si bien es un alivio muy marginal para la producción, significaría un gran esfuerzo fiscal para el Estado ya que representa dos tercios del superávit financiero.
Por caso, en el informe que elaboran Teo Zorraquín y Alejandro Meneses señalan esta dicotomía entre los que pueden ver el anuncio como una medida marketinera, dado que es lo mismo que había hace 20 días, y que no alcanza, o bien los que la ponderan porque requiere un esfuerzo fiscal por parte del gobierno para mantener el superávit. “Pero lo concreto es que hubo una mejora con respecto a ayer, y lo que en estos momentos parece menor, que es lo de “permanente”, tendrá un impacto importante en el mercado de granos. Ya que a raíz de las medidas temporarias había perdido volumen, y la mayoría de las operaciones eran spot, es decir de corto plazo o inmediatas”, señalaron.
Respecto a lo que aún no queda claro, desde “Puntos de Vista” señalan “No sabemos si los anuncios incluyen o no el alargamiento de la exigencia en liquidar las DJVE (declaración jurada de ventas al exterior) que hoy se encuentra en 30 días hábiles. Esta es otra condición importante para que se “arme” el mercado hacia adelante en las posiciones cosecha y posteriores”, explicaron.
De todos modos, lo consideraron un “mensaje positivo, por considerar al sector y las actividades agropecuarias parte de la solución del problema argentino, y también por bajar retenciones y hacerlo en forma permanente. Y por recalcar que la presión fiscal es un objetivo del gobierno seguir reduciéndola”, mencionaron.
¿Puede afectar fuertemente la recaudación la baja de las retenciones?
No son pocos los especialistas en impuestos que señalan que la baja en la recaudación de impuestos tiene que ir de la mano con un incremento en la producción de bienes y servicios, de manera que los ingresos públicos provengan principalmente de la actividad económica y con una tasa de imposición global que no la asfixie.
AL respecto, Javier Fuentes, Gerente de Impuestos de Pgk Consultores, señaló a PERFIL que hoy las retenciones del campo participan en un 7,5 % aproximadamente de la recaudación total, representando un 0,6% del PBI.
“Por lo tanto, la cuenta a realizar es restar del total de ingresos ese 7,5 %. Luego considerar los gastos corrientes del Estado y ver cuánto superávit fiscal resulta. Y, al mismo tiempo, ir pensando en el modo de favorecer la actividad económica del país”, explicó.
Tomando esos datos como premisa, Fuentes comentó que “Con un 7,5 % de la recaudación, una disminución total de estas retenciones al campo no debería afectar significativamente la recaudación, ya que por otra parte habrá otros impuestos como el impuesto a las ganancias que se vería incrementado como consecuencia del aumento en la base imponible (o debería ser lo lógico)”.
Baja de retenciones agropecuarias: ¿fomenta una mayor productividad?
Finalmente, el especialista en temas tributarias aseguró que un impuesto que el Estado debe quitar es el impuesto sobre los débitos y créditos bancarios y continuar trabajando junto con las provincias en la reducción paulatina de los impuestos provinciales.
“Eso redituará en un mejoramiento de la salud financiera de las entidades lo que permitiría introducir mejoras en la producción”.
En la mirada de Fuentes, “es importante que el estado genere las condiciones necesarias para que se de el crecimiento de las actividades económicas y sobre esa base lograr el incremento en los ingresos del Estado, junto con una reducción de gastos superfluos o innecesarios”.
Cómo quedaron las retenciones a la carne y a los granos luego de los anuncios de Milei en Palermo 2025
Más allá de todo análisis, conviene ver cómo quedaron las alícuotas de los derechos de exportación tras los últimos cambios “permanentes”.
La carne vacuna y la carne aviar bajan del 6,75% al 5%
Las retenciones al maíz y al sorgo bajarán del 12% al 9,5%;
Las retenciones al girasol, bajaron del 7,5% al 5,5%; y
las retenciones a la soja bajaron del 33% al 26%.
Las retenciones al trigo y a la cebada ya habían bajado al 9,5% pero lo que cambia es que eran hasta marzo y ahora quedan permanentes.
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