WASHINGTON.- El embajador para la Argentina designado por Donald Trump, Peter Lamelas, se presentó este martes en la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado norteamericano, donde dio un discurso en la audiencia de nominación en el que apuntó contra “la influencia maligna de potencias adversarias en la región”, como “Cuba, Venezuela, Nicaragua, China, Irán y otros que buscan socavar los valores democráticos”, al tiempo que destacó el muy buen vínculo entre el líder republicano y Javier Milei.
“De ser confirmado, me mantendré firme contra la influencia maligna de potencias adversarias en la región, ya sean actores maliciosos o regímenes autoritarios como Cuba, Venezuela, Nicaragua, China, Irán y otros que buscan socavar los valores democráticos. Creo que nuestra relación entre Estados Unidos y la Argentina será un ejemplo brillante para el resto de América Latina”, dijo Lamelas en la audiencia, a la que asistió LA NACION y que estuvo liderada por el republicano Jim Risch, presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado.
Al ser consultado sobre los alcances de la guerra de tarifas de la Casa Blanca, teniendo en cuenta que China es un socio comercial clave para la Argentina en productos como soja, litio y carne, Lamelas afirmó que Trump “ve a Milei como un amigo”.
“Entiende que la Argentina es un socio en América del Sur. La Argentina es esencial, crítico para oponerse al regímenes autoritarios como Venezuela y China”, reafirmó.
En otro tramo de la audiencia, Lamelas -que compartió la sesión con otros tres nominados- contestó una pregunta del senador republicano Ted Cruz, uno de los mayores críticos del kirchnerismo en el Congreso de Estados Unidos, sobre la situación judicial de la expresidenta Cristina Kirchner, la muerte del fiscal Alberto Nisman y la corrupción en la Argentina.
“Ella está en arresto domiciliario debido a algún favoritismo político que está pasando allí. Obviamente ella no estuvo involucrada en el atentado de la AMIA, pero definitivamente de alguna manera estuvo involucrada en el encubrimiento, y Dios sabe si estuvo involucrada en la muerte del fiscal especial”, respondió Lamelas. “Aplaudo los esfuerzos de Milei por llegar al fondo de esto”, añadió.
“Mi papel es asegurarme de que apoyaremos al gobierno de Milei en todos sus esfuerzos por llegar al fondo del atentado a la AMIA y asegurarnos de que Christina Fernandez de Kirchner reciba la justicia que bien merece. Sigue habiendo un movimiento ahí fuera. Hay un movimiento cristinista. Está probablemente más a la izquierda que el movimiento peronista. Y eso es algo que tenemos que seguir vigilando. Argentina ha vivido tiempos muy, muy inusuales. Han tenido múltiples presidencias y tenemos que seguir apoyando a la presidencia de Milei durante las elecciones de mitad de mandato y durante el próximo mandato para poder construir una mejor relación entre nuestros dos países”, dijo Lamelas, un ferviente anticastrista, crítico acérrimo del socialismo y admirador de Milei.
“Podemos aprender mucho de él”, afirmó sobre el mandatario argentino. Lamelas, un médico, filántropo y empresario de Florida nacido en Cuba, conoce al Presidente, y ambos fueron fotografiados en el resort del magnate en Palm Beach, Mar-a-Lago, el año pasado. El futuro embajador es un histórico donante de las campañas de Trump, que ha organizado fiestas de recaudación a las que han ido el líder republicano y miembros de su familia.
Durante la audiencia en un salón del edificio Dirksen, Lamelas se refirió a la necesidad de reforzar el intercambio comercial y facilitar un clima de negocios. “Estados Unidos y la Argentina comparten estrechos vínculos económicos, políticos y culturales. Una Argentina fuerte, estable y próspera no solo beneficia a sus ciudadanos, sino que también fortalece la estabilidad económica y política regional. Trabajaré para apoyar y crear oportunidades para las empresas estadounidenses, garantizar la igualdad de condiciones y promover políticas económicas que fomenten el comercio y la inversión justos y recíprocos, cooperando en cuestiones de seguridad, combatiendo la corrupción y fomentando un clima favorable. La inversión empresarial es crucial”, planteó el futuro embajador, que reemplazará a Marc Stanley.
El designado por Trump añadió: “De ser confirmado, trabajaré para garantizar que los recursos de la Argentina, su energía y sus minerales críticos, beneficien a ambas naciones. Estados Unidos desea ser el socio predilecto de la Argentina en su reapertura a los mercados globales. Por lo tanto, es de nuestro interés estratégico asegurarnos de reducir las barreras comerciales y consolidar alianzas que garanticen un mercado justo, abierto y transparente. Trabajaré para fortalecer la seguridad regional, la cooperación policial y el intercambio de inteligencia para combatir el narcotráfico y los delitos transnacionales”.
Lamelas destacó la sintonía entre Trump y Milei, y dijo que ambos países se encuentran en “un momento crucial”.
La embajada de Estados Unidos en la Argentina anunció ayer que Heidi Gómez Rápalo asumió el cargo de encargada de negocios interina en Buenos Aires, por lo que estará al frente de la sede diplomática hasta que se formalice la llegada del nuevo embajador norteamericano (Lamelas aún espera su confirmación). Luego, la funcionaria pasará a desempeñarse como vicejefa de misión.
Luego, al ser interrogado sobre la disputa con el Reino Unido por las islas Malvinas, Lamelas recordó “Estados Unidos no reconoce la soberanía sobre las islas ni de la Argentina ni de Gran Bretaña”, aunque sí reconoce la administración británica. “Tenemos una posición de neutralidad sobre las islas, y cualquier cosa que fomente el diálogo entre Gran Bretaña y la Argentina es apreciada”, dijo.
Y en la misma respuesta volvió a apuntar sus cañones contra China. “Una de mis funciones como embajador será reducir las barreras comerciales no arancelarias que existen actualmente, impuestos atrasados, controles de divisas, retrasos portuarios. Así que todos estos esfuerzos que he esbozado van a mejorar nuestras relaciones con la Argentina y empujar a China fuera poco a poco”.
Lamelas reconoció que los aranceles no son de su competencia, pero sí hizo referencia a uno de los temas que están sobre la mesa en las negociaciones entre ambas administraciones para sellar un acuerdo comercial, referido a la protección intelectual en la Argentina.
“Las compañías farmacéuticas norteamericanas y otras compañías no cuentan con la misma protección de la propiedad intelectual que tienen en Estados Unidos. Existe un estándar global. Voy a defender ese estándar, esas protecciones de la propiedad intelectual. Voy a presionar para que se reduzcan los impuestos atrasados, o se eliminen”, dijo. “Confío en que el presidente [Trump] decida el impuesto correcto para Argentina”, añadió Lamelas.
Al presentar a Lamelas en el inicio de la audiencia, Risch dijo que “Milei es un socio clave” de Estados Unidos en el hemisferio. “Espero que aproveche todas las oportunidades para profundizar las relaciones de seguridad económica con la Argentina. China extiende cada vez más su influencia en el hemisferio occidental. Todos lo sabemos. Espero, como embajador en la Argentina, que trabaje con sus homólogos para apoyar medidas prácticas que reduzcan la influencia tecnológica y financiera de China en la Argentina y en América del Sur en general”, señaló.
“Hay 23 provincias, y cada una tiene su propio gobierno, que puede negociar con fuerzas externas, con los chinos u otros para ir y hacer proyectos en esa provincia en particular, y eso también puede prestarse a la corrupción, a la corrupción por parte de los chinos”, explicó Lamelas.
“Una de mis funciones como embajador sería viajar a todas las provincias y dialogar, y tener una verdadera asociación con esos gobernadores, no sólo con el Presidente, sino con el canciller Gerardo Werthein, [el ministro de Economía] Luis Caputo, [el asesor presidencial] Santiago Caputo y todos en el gobierno. Pero mi papel es también salir al campo [en referencia a las provincias] y asegurarme de que eliminemos la corrupción”, añadió ante la pregunta de Ted Cruz.