Este miércoles trascendió que Marina Calabró y Rolando Barbano decidieron poner punto final a su relación. La noticia se conoció en medio de un agosto cargado de rupturas en el mundo del espectáculo, y fue revelada en vivo durante la emisión de LAM, donde se detallaron las señales que anticiparon el distanciamiento.
Pepe Ochoa relató que comenzó a sospechar que algo no estaba bien cuando escuchó a la conductora referirse con insistencia a su compañero de Radio Mitre y A24. “Ella hablaba sin parar de él en la radio, dele que te dele. Él le comentaba todo en Instagram, pero durante una semana y media no le contestaba nada”, señaló el panelista, antes de anunciar lo que definió como un “último momento”.
En su reconstrucción, el suricata recordó un episodio puntual que lo terminó de alertar: “Nadie se dio cuenta, pero yo estaba viendo el programa de Sergio Lapegüe un día y se van a una nota, y lo voy a decir con mucho detalle, de una paraguaya y en cuanto ponen la nota se la escucha a Marina Edith Calabró llorar a mares”.
Al no obtener una versión directa de los involucrados, el panelista buscó información en su entorno. “¿Qué dije yo? Le pregunto a los técnicos, amigos de la casa, y me dijeron que ella estaba en ‘un tiempo con Barbano’”, contó. La revelación incluyó un dato clave: “Me dijeron que él le había pedido ese tiempo a ella”.
EL ESCÁNDALO DE MARINA CALABRÓ
El comentario tomó por sorpresa a varios de sus compañeros, que no habían notado cambios evidentes en la dinámica laboral de la pareja. Sin embargo, las actitudes recientes en la radio comenzaron a reforzar la versión de crisis sentimental que circulaba en el ambiente.
Finalmente, Yanina Latorre aportó su observación personal: “Es verdad que estos días en la radio no lo nombró más”, afirmó, mientras que Ángel de Brito cerró con un mensaje directo para su compañera de panel: “No llores más, Marina”. Para remarcar, Calabró desmintió la separación.