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Arrancó la subasta de zapatillas de ballet pintadas por artistas y figuras como Susana, Oreiro-Mollo y Paloma Herrera

En el marco de un atardecer tormentoso, para decirlo más exactamente con la tormenta de Santa Rosa desatada, el foyer del Teatro Colón se vio pacíficamente ocupado por un número de invitados especiales al evento De punta al arte 2024, organizado por la Fundación Julio Bocca.

¿Su propósito? Exponer otras tantas zapatillas de ballet intervenidas artísticamente por artistas plásticos, deportistas, modelos, actores, animadores, empresarios y músicos gracias a la curaduría de Cristina Santa Cruz.

Las zapatillas de ballet intervenidas artísticamente por la ex modelo argentina Valeria Mazza para la subasta benéfica de la Fundación Julio Bocca. Foto: EFELas zapatillas de ballet intervenidas artísticamente por la ex modelo argentina Valeria Mazza para la subasta benéfica de la Fundación Julio Bocca. Foto: EFEEntre otros, Valeria Mazza, Susana Giménez, Eduardo Eurnekian, Jorman Gutiérrez, Alfredo Sábat, Eugenio Cuttica, Renata Schussheim, Martín Palermo, Humberto Tortonese y la participación especial de Paloma Herrera.

Las zapatillas de ballet firmadas por Susana Giménez, Foto: EFELas zapatillas de ballet firmadas por Susana Giménez, Foto: EFEEste año, la Fundación conmemora 26 años ininterrumpidos de formación para las artes dirigida a niños y jóvenes. De Punta al Arte 2024 se propone recaudar fondos para el Programa de Becas Académicas de la Fundación, que desde su creación otorgó más de 3000.

Las zapatillas de ballet donadas por la ex bailarina argentina Paloma Herrera, firmadas por ella. Foto: EFELas zapatillas de ballet donadas por la ex bailarina argentina Paloma Herrera, firmadas por ella. Foto: EFE

Cómo es la subasta

A partir del 30 de septiembre, las obras estarán exhibidas en el foyer de la Fundación Julio Bocca, en el Centro Cultural Borges, con entrada libre y gratuita y las zapatillas serán subastadas a través de una plataforma online a partir del día de la inauguración en el Teatro Colón. Los ofertantes podrán participar desde cualquier lugar del mundo y los resultados serán revelados en una subasta presencial.

Dice Cristina Santa Cruz, que además de curadora es coleccionista y gestora cultural: “El arte nos conecta, nos inspira y, en este caso, nos mueve a la acción. La subasta de estas piezas, que se, es una oportunidad para que todos, sin importar en qué parte del mundo se encuentren, puedan contribuir a esta noble causa. Cada oferta es un paso hacia la construcción de un futuro lleno de posibilidades para los jóvenes artistas que serán los custodios de nuestro patrimonio cultural”.

Para ofertar, basta ingresar a este link:

https://www.fundacionjuliobocca.org.ar/es/de-punta-al-arte-a2024-0

Cómo son las zapatillas

Las zapatillas exhibidas recorren un arco muy amplio de estéticas y conceptos: desde aquellas primorosamente bordadas con adornos agregados como las de Susana Giménez o en las que están clavadas púas de guitarra como la de Ricardo Mollo y Natalia Oreiro, hasta las que muestran trazos con marcador, como la de Paloma Herrera, o el dibujo siempre personal de Renata Schussheim.

Ricardo Mollo y Natalia Oreiro optaron por sumarse púas de guitarra a las zapatillas. Foto: Martín Bonetto.Ricardo Mollo y Natalia Oreiro optaron por sumarse púas de guitarra a las zapatillas. Foto: Martín Bonetto.También participaron los artistas plásticos Milo Lockett, Liliana Golubinsky, Olga Antunno, Ariel Mylnarzewicz, Gerardo Feldstein, Yari Casanova y Ernesto Pesce.

El inconfundible estilo del artista Milo Lockett, que se sumó a la subasta benéfica de la Fundación Julio Bocca. Foto: Martín Bonetto.El inconfundible estilo del artista Milo Lockett, que se sumó a la subasta benéfica de la Fundación Julio Bocca. Foto: Martín Bonetto.Pocas de las personas que intervinieron las zapatillas explicaron con algún texto complementario su fuente de inspiración. Entre estos pocos se pueden elegir las palabras de Alfredo Sábat, artista visual, hijo y colaborador del célebre Hermenegildo Sábat.

Dice Alfredo: “Ante la invitación a intervenir las zapatillas, empecé a pensar con qué. Me puse a mirar las bailarinas que pintó y esculpió Edgar Degas, en busca de alguna idea. Caí en la cuenta de que lo que mandaba no era la imagen, sino la forma de la imagen, que es la punta de la zapatilla en forma de ‘V’. Y que lo que pintara iba a tener que someterse a esa forma. Traté de encontrar alguna postura de ballet que remitiera a esa forma. Eso me llevó a buscar imágenes de El lago de los cisnes. Hasta que entendí que lo que tenía que hacer no era una bailarina en postura de cisne, sino directamente un cisne, con sus alas dándole vuelo a la zapatilla. El cisne y el ballet ya son inseparables. Y siempre van a volar juntos.”

Las zapatillas intervenidas por Alfredo Sábat. Foto: Martin BonettoLas zapatillas intervenidas por Alfredo Sábat. Foto: Martin BonettoOtro texto es del artista colombiano Jorman Gutiérrez: “Cuando recibí la invitación a intervenir las zapatillas de ballet para la Fundación Julio Bocca, me llené de emoción pensando en la diferencia que cada una de sus acciones permiten, año tras año, cumplir a los más jóvenes sus sueños artísticos. Me apasiona pintar en miniatura de manera preciosista cual orfebre interviniendo una joya decimonónica y me estimula el hermoso diseño de las pequeñas zapatillas de ballet enteladas en delicada seda, junto a la impronta de la carga teatral y dramática que representan».

agregó: «Instantáneamente resonó en mí el Cascanueces, una de las mágicas composiciones que nos permiten soñar y viajar a mundos lejanos, travesía que elegí pintar en forma de viñeta, como sucesión de escenas sin palabras que naturalmente se acompañan de los acordes que año tras año condimentan cada una de nuestras Navidades. Y quizás la escena más memorable de todas, aquella de la danza del Hada de Azúcar que le permitió alcanzar el Olimpo a Julio Bocca junto a Raquel Rossetti en el Bolshoi de Moscú en 1985, aquella donde el sueño de Marie terminó pasando a la historia como “el sueño del pibe” y el de toda la Argentina. Así decidí rendirle homenaje a la magia del teatro y del ballet, de todos quienes los conforman y de cada uno de sus sensibles personajes”.

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